El Poncho 2014 tuvo la noche del jueves su jornada inaugural, con un acto cultural que terminó con una gran fiesta para los sentidos.
Encabezado por la gobernadora de la Provincia, Lucía Corpacci, funcionarios nacionales, provinciales y municipales, el acto tuvo lugar en el salón mayor de espectáculos del Predio Ferial Catamarca y comenzó con la entonación del Himno Nacional y el Himno a Catamarca, a cargo de Rafael Toledo y la Banda de Música de la Policía de la Provincia.
El cantante lírico Silvio Arias, por su parte, interpretó a capela el himno de la Virgen del Valle para enmarcar el ingreso de la Patrona del Turismo, que fue custodiado por sus guardianes. Mientras que fue el padre José Díaz el encargado de bendecir el inicio de la fiesta.
Fueron las responsables de las Secretarías de Turismo y de Cultura, Natalia Ponferrada y Patricia Saseta, a cargo de la organización del evento, las encargadas de las palabras de apertura.

Mencionó también que en esta edición de la fiesta participan más de 700 artesanos de Catamarca, el país y varios países de Latinoamérica y que, en el Pabellón Turístico “Catamarca, Hermosa por Naturaleza”, todos los municipios de la provincia están presentes exponiendo su oferta turística.
Por su parte, Patricia Saseta, secretaria de Cultura, valoró el sentido de pertenencia que el Poncho tiene entre todos los catamarqueños. “No es fácil explicar a quienes no son catamarqueños de qué se trata para nosotros esta fiesta. Pero parangonando a la terminología futbolística, el poncho es un sentimiento”, señaló.
Saseta resaltó el nivel artístico de la fiesta, señalando que en el escenario todos los artistas, sean del pueblo más alejado de la provincia o de Buenos Aires, cuentan con los mismos recursos para salir a escena.
También valoró el trabajo en equipo de las distintas áreas de Gobierno para hacer posible un evento de la magnitud del Poncho: “Esta, de alguna manera, es la respuesta para quienes dicen que nada ha cambiado en Catamarca. Creo que por el contrario, como todo cambio verdadero debe surgir de lo más profundo de los hombres y de la sociedad. Así como una sociedad necesita infraestructura, servicios, educación para desarrollarse, o atención de la salud, tarea en la que está empeñada nuestra Gobernadora, también necesita reforzar sus valores, su solidaridad, su sentido de trabajo en equipo y eso es lo que venimos trabajando desde que asumimos el compromiso de acompañar a nuestra gobernadora”, manifestó.
El ministro de Cultura de la Nación, Enrique Meyer, también destacó la dimensión de la fiesta y su importancia en el mapa de festividades del país. Y resaltó un logro conocido hace pocos días, en el que estuvieron empeñados seis países y siete provincias argentinas: la declaratoria del Qhapaq Ñan o camino del Inca como Patrimonio de la Humanidad lo que, destacó, redundará en el posicionamiento turístico de los lugares por donde pasa este itinerario cultural.
Cierre artístico.
Un cuadro artístico de gran despliegue fue el que dio cierre al acto oficial de apertura de la 44° edición de la fiesta.
Más de 150 artistas catamarqueños, entre músicos, cantores y bailarines, formaron parte de la puesta en escena, plena de color, música y movimiento realizada bajo la dirección coreográfica de Pablo Segovia y la dirección musical de Leonardo Eschmuller.
Del espectáculo participaron bailarines de la Academia Semblanzas, Atahualpa Yupanqui, Piriqui Pérez y Ballet Dirección Deportes, los músicos de la Orquesta del Programa de Desarrollo Musical de la Secretaría de Cultura, con la dirección del maestro Marcelo Rodríguez Scilla y un ensamble de músicos catamarqueños integrado por Germán Selva, Luis Bazán, Miguel Zaffaroni, Juan Ignacio Molina, Leonardo Eschmuller, Enzo Zelarayán y Pablo Reinoso y por los cantores Itatí Álvarez y Miguel Melián.
A través de la música y la danza, el cuadro propuso un recorrido por las distintas regiones del país, invocó a la Virgen del Valle y rindió un homenaje al poncho, la prenda convocante de la fiesta.