“Colonia” para los argentinos no es solo historia, es la combinación perfecta entre tranquilidad, seguridad y cercanía.

Nosotros estamos tan familiarizados, que podemos disfrutarlo en cualquier momento.

Esta pequeña ciudad, tiene paisajes bellísimos: callejuelas empedradas con fondos de río, playa, sol, costanera de arenas blancas, y mucha mucha paz y tranquilidad, a tan solo una hora de distancia. Las actividades están relacionadas a esta búsqueda de “bajar un cambio”.

Pasear por la Antigua Colonia de Sacramento, permite disfrutar su bella arquitectura, cada grupo de casas es la historia es sí misma del lugar.

Un poco de historia.
El nacimiento de La Nova Colonia do Santissimo Sacramento comienza cuando el Rey de Portugal ordenó al Gobernador de Río de Janeiro, por entonces Manuel Lobo, que fundara un establecimiento militar fortificado en el nacimiento del Río de la Plata.

España y Portugal sostuvieron conflictos para delimitar la frontera de sus respectivos dominios en la costa atlántica de América del Sur.

Colonia de Sacramento desde su fundación, el 1° de enero de 1680, sufrió las disputas y acuerdos como el tratado de Tordesillas, el tratado de la Permuta y el tratado de san Ildefonso.

Luchas armadas y pobladores han dejado vestigios de arquitectura lusitana, española y por supuesto colonial rioplatense.

Un patrimonio de todos.
Por lo tanto, el casco histórico ofrece atractivos valorizados y jerarquizados. La Puerta de la Ciudadela, la Iglesia Matriz, El faro, las ruinas del convento de San Francisco, son solo alguno de los vestigios que lograron ser considerados Patrimonio de Todos.

Dentro de la ciudadela, se combinan casas bajas con empedrados grotescos. La calle que guarda leyendas “La calle de los Suspiros” se le adosan infinidad de historias, tantas como guías la recorren; una es que la frecuentaban las mujeres de vida fácil. Otra que fue asesinado un enamorado buscando su novia. Todas por cierto, con pinceladas de aventuras y mística.

La porcelana fría es uno de sus materiales predilectos a la hora de elaborar souvenirs, es así que las calles de Colonia y monumentos históricos llevan sus nombres en azulejos de este material. El sistema de iluminación del circuito es con faroles que le dan un marco especial a cada imagen que guardes en tu celular.

Dentro de este casco histórico declarado Patrimonio de la Humanidad desde 1995, te cruzarás con voces extranjeras en cada rincón, esto se debe a que es visitado todo el año, por muchos turistas europeos. En búsqueda de vinos uruguayos y queso de colonia van diseminándose por cada bar coloniense.

En un abrir y cerrar de ojos
Uruguayos y Argentinos han formado una hermandad, y comienza la época de las minis vacaciones donde Colonia te abre las puertas para pasar unos días diferentes.

En un abrir y cerra de ojos, a tan solo una hora, podes probar su gastronomía típica, como el «Chivito Uruguayo»… y su bebida el «Medio y Medio».
Una combinación perfecta para luego tomar un descanso en el muelle y contemplar el río con su puesta de sol.

Otras dos lugares para recorrer es la zona residencial de Colonia de Sacramento con su gran costanera de playas de río y las afueras con un grupo edilicio llamado Real de San Carlos, nombrado así en honor a el Rey Carlos III. Aquí se encuentran la Plaza de Toros y el frontón de pelota.

Esta muy bien organizada, porque una gran parte de sus ingresos, se debe al turismo. Las empresas de ferries como Buquebus, Colonia Express o Seacat te ofrecen paquetes «day tour», por una noche o dos noches.

Si tu presupuesto es acotado, puedes ir en un día, donde el paquete consta del viaje de una hora, almuerzo, guía dentro del casco histórico y un bus turístico con guía, con el sistema Hop On Hop Off, con horarios y 10 paradas fijas señalizadas perfectamente.

Otra actividad muy recomendable para esta época del año, es alquilar unos carritos de golf, y esto tiene la ventaja de no estar atado a ningún horario, se puede estacionar fácilmente, es para cuatro personas y se accede a calles que los vehículos más grandes no pueden acceder. No olviden que el casco histórico es muy empedrado y deberás caminar con calzado cómodo.

Otro sector que vale la pena es la rambla o Costanera, es una de las atracciones turísticas más interesantes para poder apreciar paisajes en la ciudad de Colonia del Sacramento.

Se puede pasear, y recorrer las playitas pequeñas, no son ideales para veranear; pero son de arena clara. Es muy común ver a muchos turistas ya sea en auto, en moto o bien en bicicleta por las tardes noches de Colonia pudiendo apreciar los maravillosos paisajes que brinda la costa.

Para los que les gusta conocer las ciudades durante la noche y descubrir cómo cambian al ocultarse el sol, podemos decir que colonia tiene su pincelada pintoresca. La noche, las farolas y esos lugares pequeños donde comer son muy acogedores.

Tenemos que tener en cuenta que no es una gran ciudad en tamaño y población que deberás ocuparte de ir temprano, pero disfrutaras porque hay lugares para todas las edades.

En cuanto a hotelería hay variada y de acuerdo a tu bolsillo, por ejemplo si quieres puedes pernoctar dentro del casco histórico, donde las mansiones de la época colonial, han sido remodeladas para recibir turismo.

Sino en el Centro de Colonia también hay variadas formas de pernoctar; muy buena y de bajo costo. De alta gama se encuentra el Hotel Sheraton a las afueras con servicio de SPA.

¿Te preguntarás por qué disfrutar de esta ciudad?
Porque el que la conoce te dirá es muy pintoresca y tranquila… pero nada de lo que te explique será suficiente. No solo es lo que ves en fotos o imágenes sino es lo que se siente.

Es una ciudad que esta todo a mano, es pequeña, se recorre fácilmente y lo mejor no es su paisaje, ni su legado histórico sino la amabilidad de los colonienses que trabajan diariamente para atendernos de lo mejor.

Fotos: @sentiargentina/ Ricardo Seronero