«No necesitamos más oídos a nuestros legítimos reclamos, sino soluciones urgentes del estado», resaltó la presidente de la Cámara de Restaurantes Verónica Sánchez, quién fue acompañada por Camilo Suárez, presidente de la AHRCC, por Carlos Yanelli, secretario de la Cámara de Restaurantes y los empresarios gastronómicos de Puerto Madero: Eduardo Aguirre y Ricardo Fernández.
En el marco de un importante salón de eventos de uno de los locales en Alicia Moreau de Justo y en presencia de numerosos empresarios afectados por las obras en la zona, se realizó una conferencia de prensa donde se dio a onocer todas las dificultades en el acceso a estos restaurantes que se encuentran bloqueados por el avance de la obra pública.
Esta situación insostenible, que los coloca entre la espada y la pared, y al borde de iniciar despidos masivos y cierre de locales por falta de clientes es producto de la imposibilidad de ingresar normalmente a la zona.
Las autoridades que presidieron la reunión destacaron la firma de un petitorio en donde se tratan los puntos más conflictivos entre los cuáles la crisis de consumo es sólo el inicio de la debacle que solo empeoró con el plan de obras del “Paseo del Bajo”.
El apoyo expresado por los empresarios a las mejoras en la zona se ha tornado primero en molestia y actualmente en reclamo por la segura pérdida de puestos de trabajo de cientos de familias -entre puestos directos e indirectos- que se encuentran ociosos ante la limitación de la clientela.
Mientras tanto el comerciante continúa soportando una alta presión impositiva y cumpliendo todas las múltiples obligaciones que por ley debe atender frente al estado y a sus trabajadores.
El descontrol en el tránsito vehícular producto de la intervención estatal y la desaparición de las plazas de estacionamiento en todo el corredor gastronómico están condenando a los comercios a un final anunciado que se ocupan de denunciar ante la pasividad de las autoridades de la ciudad.
Petitorio.
A las autoridades del Gobierno de la Ciudad, medios de prensa y a la opinión pública:
Los empresarios gastronómicos y las organizaciones representativas del sector, nos encontramos en estado de alerta atento la grave situación por la que atraviesan nuestros negocios. A la crisis económica que venimos sorteando hace años, se suman los serios perjuicios que las obras del Paseo del Bajo irrogan a locales comerciales. No nos oponemos a la obra ni al progreso, pero es imperioso que las autoridades atiendan a nuestras inquietudes y nos den respuesta a nuestros planteos.
Cuatro mil trabajadores con sus familias y nuestras legítimas inversiones, dependen de que nuestros negocios sigan abiertos. Hemos sido escuchados, no lo negamos, pero ser escuchados no implica ser atendidos. Nuestros reclamos exigen respuesta y no oído, por ello, les pedimos a quienes nos gobiernan que con carácter de urgente tengan a bien ubicar en sus agendas, con carácter prioritario los siguientes temas:
1) Espacios destinados al estacionamiento vehícular (en la actualidad, en el devenir de la obra y en el futuro).
2) Desfinanciamiento de las empresas por la caída estrepitosa del público y de las ventas.
3) Imposibilidad de mantener las fuentes de trabajo.
4) Indiferencia estatal ante una presión fiscal injusta, atento a la afectación del polo gastronómico de Puerto Madero.
5) Descontrol en el tránsito vehícular.
6) Insatisfacción del consumidor que ya no quiere exponerse a la aventura de llegar a Puerto Madero.
La falta de respuesta a todos y cada uno de los puntos antes mencionados, torna insostenible la continuidad de muchos de los establecimientos firmantes. Los despidos y los cierres serán la consecuencia inmediata de la indiferencia del Estado a los problemas que desde hace larga data venimos planteando.
Fuente: Prensa AHRCC de Bs As.