La localidad puede ser la base para iniciar el recorrido por los distintos destinos neuquinos de la cordillera. Un desborde de color, naturaleza y sabores para disfrutar y compartir en familia.
En el Corredor de los lagos, la cocina gourmet se fusiona armónicamente con la tradicional y la europea, adaptándose perfectamente al gusto y expectativas de los visitantes.
La zona se identifica principalmente con carnes de ciervo, jabalí y trucha, cocinadas y procesadas de diferentes formas: al asador, a la parrilla y hasta en patés, embutidos y escabeches.
Las carnes ahumadas en los últimos años han adquirido mucha popularidad, ya que el humo y la madera intensifican los sabores y le otorgan un toque rústico al plato. Se acompañan con hongos y salsas agridulces, donde los frutos rojos adquieren gran protagonismo.
Estos frutos deliciosos también integran postres, salsas, dulces o mermeladas junto a otras frutas silvestres de la zona cordillerana como el michay o calafate, la rosa mosqueta y la frutilla.
El chocolate es característico de la región, y sin dudas es ideal para contrarrestar las bajas temperaturas de los largos inviernos. Está presente en diferentes formas como barras, rama, con leche caliente o fría, en helados, en alfajores y hasta en tortas y cupcakes; las casas de té y chocolaterías de la región bien saben las bondades del chocolate, sobre todo de su versatilidad y nobleza.
VIVI ARGENTINA.
Fuente: http://www.laangosturadigital.com.ar