Ambos circuitos se caracterizan por reunir miles de postales, miles de aventuras, miles de experiencias, y cada verano reúnen a miles de turistas.

Se trata de dos atractivos de reconocimiento mundial, el entorno natural se encuentra protegido a través de las administraciones de los Parques Nacionales Nahuel Huapi, y Lanín. La experiencia de recorrerlos atraviesa los destinos de Villa La Angostura, San Martín de los Andes y Junín de los Andes.

La Ruta de los 7 Lagos es uno de los caminos más emblemáticos del universo turístico de la Argentina. Se trata de uno de los tramos más bellos de la mítica Ruta Nacional Nº 40, que une a los destinos de San Martín de los Andes y Villa La Angostura, que acumula una oferta hotelera y gastronómica de excelencia.

Partiendo desde Villa La Angostura, destino recostado sobre las costas del Lago Nahuel Huapi, comienza el circuito hacia el norte, un camino ondulante donde en cada curva sorprenden las montañas, los bosques y los lagos con su esplendor. A pocos kilómetros del destino, se muestran los Lagos Correntoso y el Espejo, dos lugares ideales para disfrutar de una tarde de sol, teniendo en cuenta sus amplias playas de acceso público.

La pesca deportiva en el río Correntoso, el más corto del mundo, que estrecha al Lago Correntoso y al Nahuel Huapi, es un paraíso soñado por los amantes de la Pesca Deportiva, ya que reúne las condiciones adecuadas para la pesca con mosca o fly casting. Además, el puente peatonal del río es el lugar preciso para tomarse una foto en el paraíso.

Luego, una de las alternativas es tomar el desvío para acceder a la Ruta Provincial Nº 65, que nos conduce a Villa Traful, un destino enclavado en la ladera de la montaña, un verdadero balcón de ensueño sobre el majestuoso lago que destella su nombre.

Si se continúa por la Ruta Nacional 40º (7 Lagos) hacia el norte, al recorrido se le suman sucesivos miradores para que los turistas puedan tomar un descanso, y disfrutar de la inmensidad del paisaje. Entre el frondoso bosque que rodea el camino hace su aparición el Lago Escondido, donde se pueden observar sus aguas mediante un mirador que se encuentra a la vera del camino.

A continuación, a pocos kilómetros se despliega una inmensa área de acampe ideal para pasar el día entre los Lagos Falkner y Villarino. Ambos Lagos se encuentran enfrentados, y los turistas los pueden apreciar uno a cada lado de la ruta. Prácticamente marcan la mitad de la Ruta de los 7 Lagos, y es el lugar donde los visitantes eligen para frenar, armar el mate, disfrutar de los Lagos y continuar el recorrido.

A pocos kilómetros de dicha área comienza a producirse un paulatino cambio en la vegetación, cambian los colores de los bosques y es donde se abandona el Parque Nacional Nahuel Huapi, para dar entrada al Parque Nacional Lanín. Le siguen, antes de llegar a la ciudad de San Martín de los Andes, el Lago Hermoso y el Lago Machónico.

En cada uno de los lagos del circuito se puede hacer un alto, disfrutar de las playas y de los senderos habilitados completando la experiencia de sentirse parte de una naturaleza única e inigualable.

San Martín de los Andes, ubicada a orillas del Lago Lacar, dispone de una amplia y variada oferta de servicios: trekking, senderismo, mountain bike y cabalgatas a través del bosque, llegando a cascadas, lagunas, o panorámicas maravillosas que permiten apreciar el espectáculo que la naturaleza ofrece en la temporada.

El destino ofrece excelentes propuestas de cocina regional en restaurantes y bares. Diversos platos regionales con conejo cordillerano, trucha, cordero, frutos rojos y otros de la zona.

A pocos kilómetros de San Martín de los Andes, la localidad de Junín de los Andes conforma un destino que combina la introspección a través del Parque Escultórico Vía Christi y Cristo Luz.

El imponente Parque Escultórico Vía Christi, se ubica en el cerro La Cruz, y es obra extraordinaria del arquitecto Alejandro Santana. Se trata de una de las experiencias más emocionantes para los visitantes. A través de 23 estaciones y una mirada contemporánea conjuga el evangelio con la cultura mapuche y las tradiciones criollas, ofreciendo gran atractivo cultural y artístico que culmina en la gran figura del Cristo Luz que emerge de la cima de la montaña.

Durante el circuito, hay una confitería, con un salón y un deck exterior con accesibilidad para personas con discapacidad. Desde allí se puede disfrutar un descanso con una vista panorámica de la ciudad de Junín de los Andes.