La presencia de gente superó todas las expectativas y marcó que ha nacido una fiesta que debe crecer y establecerse como una de las grandes fiestas de nuestro distrito Pueblo Santa María fue ayer una fiesta. Una fiesta compartida por toda una comunidad que se unió para dar nacimiento a la fiesta del strudel, una maravillosa idea que nació para quedarse visto el tremendo éxito de público que tuvo.
Lógicamente que hubo muchas cosas que no salieron bien, pero el espíritu de la fiesta fue tan natural y tan bien buscado que casi no hubo quejas y todos instaron a los organizadores a mejorar para el año que viene con la convicción de que la fiesta debe seguir, hacerse cada día mejor y brindar en cada edición más y mejores servicios a los visitantes.
Ya promediando la mañana comenzaron las atracciones con una nutrida e interesante feria artesanal, en la que, además, muchos stands ofrecían distintas variedades de strudel y otras delicias de la gastronomía alemana, las que lamentablemente se agotaron en muy poco tiempo, quedando quienes llegaron después del mediodía sin la posibilidad de degustar esa delicia ya que todo lo que habían preparado las diferentes instituciones de la tercera colonia alemana no alcanzó para tanta demanda. Y cuando se terminó el strudel, también la gente agotó las provisiones de kreppels, tinne kugen, sauerkummer, chucrut, chorizo seco, miel y otros productos a precios accesibles.
El strudel gigante
Alrededor de las 11:00 el cheff Javier Graff, acompañando por un importante séquito de ayudantes pusieron manos a la obra y amasaron y estiraron la gran masa para elaborar el strudel de 15.30 metros, el cual fue luego enrollado en un trabajo conjunto y depositado en el gran molde de metal, elaborado especialmente por una zinguería para esta ocasión, el que luego se fraccionó en partes para poder ser horneado. Todo a la vista y coronado por el gran aplauso de la gente que premió la destreza y el ánimo de los cocineros.
Ya el día anterior los representantes de las instituciones, siempre dirigidas por la experta mirada de Javier Graf, habían elaborado un enorme strudel de levadura, un tipo de strudel que había caído algo en el olvido y que con esta fiesta se recuperó para la memoria colectiva de Pueblo Santa María.
A la hora del almuerzo todos los lugares rebozaron de gente y fueron muchos los que se quedaron sin almorzar ante la falta de lugares, lo cuál seguramente deberá de ser mejorado para la próxima edición pues mucha gente llegó desde una amplia región y no tuvo dónde comer algo.
Más allá de estos pequeños inconvenientes, fácilmente solucionables para la próxima edición, lo cierto es que para la hora del acto central se había reunido una multitud cercad del palco, gente que recibió con una ovación a quienes trajeron el strudel recién horneado para exponerlo y luego, terminado el acto, repartirlo entre los que pudieron llegar a degustarlo, previa conformación de un larga cola de interesados.
El acto
Fue breve pero emotivo el acto de inauguración de la Primera Fiesta del Strudel, acto que comenzó con el ingreso de la Banda Municipal Bartolomé Meier, que primero interpretó el Himno Nacional y luego el Himno alemán.
Finalmente, el coro de la localidad entonó, mientras lavanda lo ejecutaba, el himno de alabanza a Dios Grosser Gott.
En nombre de los organizadores habló la docente Patricia Maier, quien luego de saludar a las autoridades presentes resaltó el trabajo conjunto de todas las instituciones de la comunidad. “Hoy es un día muy especial y nos embarga la emoción porque nos llegan los recuerdos, ¿quién no ha compartido esta comida tan tradicional con sus abuelos o sus padres, muchos de los cuáles hoy no están?” se preguntó la oradora, para luego señalar que “estos recuerdos nos impulsaron y lo seguirán haciendo, para seguir trabajando para rescatar y conservar nuestras tradiciones”. “Es lo que pretendimos con esta fiesta, mostrarle estas cosas a nuestras jóvenes para que no se pierdan estas costumbres en el baúl de los recuerdos, por eso rescatamos el strudel de levadura, que muchos no conocían y es algo que nos llena de satisfacción”.
La docente pidió disculpas por las fallas, pedido que recibió un aplauso del público, indicando que se entendía perfectamente lo sucedido y que nadie estaba molesto, ya que realmente ni las previsiones más optimistas hubiesen esperado semejante éxito de público. “Nos han desbordado y lamentablemente muchos quisieron degustar strudel y no han conseguido, por eso reitero las disculpas en nombre de todas las instituciones, les agradecemos la presencia y quiero remarcar el trabajo de toda la comunidad, fíjense lo que hemos logrado, ese es un ejemplo que merece un fuerte aplauso”, finalizó, no sin antes destacar el valioso aporte en la organización de Patricia Mellinger.
Acto seguido los organizadores recibieron sendas declaraciones protocolares de parte del municipio, a través del jefe comunal, y de la Cámara de Diputados provincial, de manos del diputado Ricardo Moccero, presente en la celebración.
Y como cierre el intendente Roberto Palacio dejó un breve mensaje en el que rescató el trabajo conjunto de todos quienes hicieron posible la fiesta, y comparando el trabajo de confección del strudel con su gobierno, dijo que era una muestra de cómo, sumando voluntades todo es posible, pidiendo que a nivel distrital se imite ese ejemplo porque todos unidos los suarenses es mucho lo que pueden hacer.
Finalmente hubo mucha música alemana, baile, más artesanías, mucho encuentro y camaradería y también visitas guiadas por la localidad organizadas por el área de Turismo, donde los visitantes pudieron recorrer un circuito turístico, apreciando cada uno de los stands preparados para la fiesta; desde exposiciones de carros antiguos hasta de modernas maquinarias, así como también lo que se refiere a la gastronomía alemana.
Fuente: www.nuevodiadigital.com
Fotos: www.facebook.com/turismomunicipalidad.coronelsuarez