Por Fabiana Chércoles
El patrimonio Cultural de la ciudad de Salta se encuentra a la vista del visitante. Recorrer el Casco Histórico es fácil y muy agradable en esta época.

Podrás interactuar con “El Cuchi” ya que su escultura es de tamaño natural y presenta un escenario tan cotidiano que se presta a la selfie. El creador de tantos éxitos musicales, hoy forma parte de la trayectoria cultural de Salta y de todo nuestro país. ¡Quién no conoce Zamba de Balderrama!, o ¿Lloraré? o ¡La Pomeña!.. y tantos clásicos cuyas composiciones fueron de su autoría.

Salta se embellece. Los proyectos de restauración y puesta en valor han dado sus frutos. Un ejemplo de ello es la casa centenaria de Martín Miguel de Güemes, ahora transformada en el Museo del Héroe Nacional y Gesta Güemesiana.

Sin duda cuando hay un trabajo y políticas serias se logran objetivos valiosos. Según la ley 26.125 a partir del 22 de agosto del 2006, la figura de Güemes es “Héroe Nacional”. Se instauró el 17 de junio como feriado nacional y Día de la Libertad Latinoamericana. Y si vas a Salta, su casa recrea toda su epopeya. Gracias a los recursos tecnológicos, audiovisuales, efectos lumínicos, sonoros y escénicos te sentirás compartiendo los momentos más importantes de la vida de Martín Miguel Juan de Mata de Güemes Goyechea.

Otro sitio, cuyo edificio también se puso en valor es el Museo de Arqueología de Alta Montaña, ubicado frente a la plaza principal de la ciudad de Salta. Como su nombre lo indica este lugar posee el objetivo de difundir su importante patrimonio arqueológico hallado en 1999 en la cima del volcán Llullaillaco: “Los niños del llullaillaco”.

El MAAM, luego de varios años de trabajo científico y técnico presenta a uno de los niños por vez, para no exponer a los tres que posee, y producir su deterioro. Estos niños fueron encontrados en el volcán a 6.700 msnm con condiciones que dieron como resultado un excelente estado de conservación: baja presión atmosférica, baja humedad, bajas temperaturas y estabilidad térmica en un medio aséptico. Estas mismas condiciones artificialmente se mantienen para poder exponer «los niños» en óptimas condiciones.

Cabe señalar que el Museo respeta todas las opiniones relacionadas con la presentación de los cuerpos humanos y por ello, ofrece al visitante la opción de contemplar a estos representantes del mundo inca o, continuar su recorrido sin hacerlo.

Si optas por esta decisión, el MAMM posee muchas piezas destacadas: prendas, utensilios, tocados, herramientas, ofrendas, etc. Todo, para introducirte en el mundo Inca.

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Fotos: Fabiana Chércoles @sentiargentina