Por Fabiana Chércoles desde San Antonio de Areco.
113 km. son los que te permiten vivir un “finde” gauchesco. Los fines de semana primaverales que se aproximan son una magnífica oportunidad para que disfrutes de “un día campero y de tradición”.

San Antonio de Areco, es una de las poblaciones más antiguas, (1730) no solo por su fecha fundacional, sino porque aun conserva las características del campo argentino.

Su plaza rodeada de adoquines, sus veredas angostas, esquinas con falta de ochavas en algunos casos, sus casonas nostálgicas, y la presencia de algún paisano a caballo o caminando por esta ciudad, te remonta a cualquier cuadro de Molina Campo, o incluso a la novela rural Don Segundo Sombra de Ricardo Güiraldes.

Uno de los lugares emblemáticos es el Parque Criollo. El nombre original de este instituto era Parque Criollo Ricardo Güiraldes y Museo Gauchesco de la Provincia de Buenos Aires. Por unos años perteneció a la Provincia de Buenos Aires y a partir de los 80’pertenece a su municipalidad.

Casi 90 hectáreas en las afueras del pueblo pasando el “Puente Viejo”; te espera una selfing increíble en esta época. Si cerrás los ojos podés imaginar… los matices de verdes, el cielo intenso, el saludo de un vecino, el olor a pasto, a campo… o a un buen asado!, es irresistible!!

Todo muy romántico, pero a la hora de comer, como lo hacían los gauchos, es en Areco donde debes estar. Disfrutando de un almuerzo campero con asado a la cruz. Participando de algún fogón de paisanos, con música y baile y algunos matecitos con pastelitos….es una oportunidad para reencontrarte con nuestras raíces.

Pero no solo de comer vive el hombre. Podrás disfrutar del día al aire libre y recorrer su historia porque el pueblo rinde culto permanente a la tradición.

Desde 1939 se celebra en noviembre la Fiesta de la Tradición, la conmemoración gaucha más antigua del país.

En 1999, el pueblo fue declarado por la Presidencia de la Nación Poblado Histórico de Interés Nacional y es por ello, que son MHN los siguientes lugares y edificios: El Puente Viejo, El Parque Criollo Ricardo Güiraldes y Museo Gauchesco de la Provincia de Buenos Aires, La Pulpería “La Blanqueada”, la Iglesia Parroquial de San Antonio de Padua, la casa de la Intendencia Municipal y el casco de la Estancia La Porteña. Todo este reconocimiento hicieron que en el 2014 fuera declarada a San Antonio de Areco, Capital Nacional de la Tradición.

Con respecto al Museo Gauchesco Ricardo Güiraldes, se reabrió con una disposición de su acervo patrimonial diferente, se usa un nuevo lenguaje para exponerlo, mucho más didáctico. Lo más loable es que se recuperó muchísimas piezas de incalculable valor histórico patrimonial. Como destino tradicionalista, podemos ver todos los productos que utilizó el gaucho, su apero, sus boleadoras, facones, la sala de tientos y filigranas, platería, ¡que fantástico!

Otros atractivos como el Museo Las Lilas, con un espectáculo de Luz y Sonido con la vida de Don Tiléforo Areco, personaje ilustrado por Molina Campos. Museo de la Platería Draghi, donde verás el taller de platería en su máxima expresión… es solo una muestra de lo que podes visitar.

San Antonio de Areco vive del turismo. Está acostumbrada a convivir con el río Areco y este río encausado, es parte del paisaje de la localidad. En su recorrido, el río, pasa por varias estancias una de ellas la histórica “La Porteña, en donde Ricardo Güiraldes escribió la famosa novela gauchesca Don Segundo Sombra.

Es por ello que mas allá de las lluvias, Areco tomó conciencia y buscó la forma de solucionar las crecidas de manera responsable. Un pedido que cumplía 30 años, fue escuchado y hoy está en proceso un plan de obras que van a permitir la solución definitiva.
Este último registro de lluvias ha sido peor que el del 2009, sin embargo, los trabajos que se han realizado hasta el momento, permitieron un daño menor. Pero las obras hídricas no son las únicas medidas tomadas por la intendencia. Son distintas acciones las que hacen “un todo”.

Y en este caso, además el municipio de San Antonio de Areco, puso en funcionamiento un Centro de Monitoreo de Alertas Tempranas, que permitió evacuar a tiempo, en seco y de manera preventiva a las personas en situación de riesgo.
Si a esto se le suma la buena predisposición del Arequero que con nobleza trabajó posteriormente al temporal, en el aseo y reacondicionamiento; podemos imaginarnos ¡con qué alegría nos recibirá!

Pintorescos alojamientos, esmerada gastronomía y una nutrida agenda de propuestas ofrecen al visitante una buena estadía.

San Antonio de Areco un lugar ideal para disfrutar y relajarse.

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Fotos: Ricardo Seronero/sentiargentina.com