Por Fabiana Chércoles desde San Antonio de Areco.
Todo está intacto, su arquitectura y casco histórico, el bullicio y sus viejos boliches y bares cargados de historia. El viejo pueblo de don Segundo Sombra y Ricardo Guiraldes.
Sus cordiales paisanos y hospitalarios vecinos, su gastronomía regional, sus hoteles, sus posadas, para que la escapada sea más larga; su calma y tranquilidad es envidiable. En síntesis, la atmósfera del viejo pueblo de Don Segundo Sombra y Ricardo Güiraldes, permanece inalterable y es un orgullo para los arequeros mostrarlo al mundo, una vez más.
Insisto por qué está tan cerca desde la Ciudad de Buenos Aires?. Tenés los primeros 71 kilómetros de autopista por la Panamericana. Se continúa, -sin desviarse- por Ruta Nacional N8 hasta la rotonda del Km110 y cruce con la RP41. De ahí tres kilómetros más hasta el centro.
Vemos que muchos porteños se van los fines de semana a tomarse un relax. Más de uno comenta… lo necesito! ¡Qué mejor que un destino como San Antonio de Areco que se encuentra tan cerca de Buenos Aires, para descansar!
Cuando te digo aire pueblerino es porque entre algunas costumbres, cada tanto, te encontrás un paisano con su vestimenta típica como la tradición lo indica, con bombachas, botas, pañuelos, boinas y sus inconfundibles rastra, con innumerables decoraciones; además claro está, de su facón criollo colocado en la cintura.
Muchos porteños han querido cambiar su residencia para transformarse en un gaucho de este pago… es que se respira paz y tranquilidad.
El casco histórico se encuentra alrededor de la Plaza Ruiz de Arellano, allí yacen los edificios más emblemáticos. Cuando camines encontrarás la Parroquia San Antonio de Padua, que su primera construcción data de 1730 y dio origen al pueblo. La que hoy vemos es la tercera parroquia de 1870. La antigua Casa Municipal, otro valor significativo, que funcionó hasta 1967; está ubicada en Bartolomé Mitre frente a la plaza Arellano.
Los lugareños te ofrecen disfrutar de los usos y costumbres de la zona. El Museo Las Lilas, por ejemplo muestra la colección de obras originales del extraordinario pintor Don Florencio Molina Campos. Acuarelas y pasteles le dan verdadera vida al paisano “Don Tiléforo Areco”. Además el espectáculo de luz y sonido, un show que no tiene desperdicio con la voz del cuentista Luis Landrisina. Aquí podrás tomar algo que incluye mate cocido, entre otras infusiones. www.sanantoniodeareco.com/museo-las-lilas#el-museo
Otra expresión de arte se ve en los plateros y en los orfebres de la zona. Al lado de la nueva municipalidad, se presenta el Museo Taller Draghi, familia tradicional en el rubro. Ofrece la colección de platería criolla más destacada de la región. La familia Draghi ha transmitido de generación en generación el arte y el trato con la plata, este metal tan noble utilizado por los gauchos más reconocidos: mates, cuchillos, etc. El taller es un entorno mágico donde entre “martillo y cincel” se ve la creatividad en su máxima expresión. www.draghiplaterosorfebres.com
Un nuevo Centro Cultural se abrió en la Usina Vieja de Areco, también conocido como Museo de la Ciudad. Te ofrece rasgos de la historia de San Antonio de Areco. Por ejemplo la historia del molino, que fue el origen industrial de la zona.
El tipo de arquitectura que ves en esta localidad, está explicada paso a paso. Cómo fue el primer alumbrado público de Areco. Expone antigüedades y ciertos testimonios de personajes locales que decidieron, por ejemplo, construir un avión, sin ser ingenieros aeronáuticos. Un relato fantástico.
La estrella de Areco.
La estrella de Areco en actividades indoor es “El Museo Gauchesco Ricardo Guiraldes” ubicado junto al Parque Criollo. Los artesanos plateros y sogueros se ven en la sala “Tientos y filigrana”; un homenaje merecido. En la sala del gaucho, la Bandera Nacional utilizada en la Fiesta de la Tradición posee un lugar destacado.
El patio de la pulpería, el salón de carruajes son recomendables. Los aperos expuestos son de un valor incalculable. El famoso poncho arequero, tiene su lugar en las vitrinas. Compite a nivel de cualquier poncho del país. Y digo compite, porque se presenta en Catamarca en la Fiesta Nacional del Poncho y lleva premios.
Sentí el pago.
Próxima al museo, la Pulpería “La Blanqueada” es una manifestación de arquitectura criolla típica.
Este Museo tan tradicional, y con gran valor para todos los argentinos, permaneció cerrado al público desde el 26 de diciembre de 2009, debido una inundación tremenda. Hoy, el Museo se encuentra en optimas condiciones de verse y además, no lo para ni las tormentas, porque el municipio conjuntamente con sus habitantes lograron ponerlo en pie definitivamente. Desde mi humilde lugar, creo que es un deber conocerlo. Hay mucho esfuerzo detrás para que nosotros podamos disfrutar de semejante patrimonio.
Un lugar para degustar platos típicos es La Esquina de Merti, un clásico de Areco, allí posee antiguos objetos, publicidades antiguas, y fotos que nos remontan a Ricardo Güiraldes. En cuanto al alojamiento lo ideal es pernactar en varias estancias. Una de ellas es El Ombú con actividades como caminatas cabalgatas, paseos en sulky, mechadas con un buen asado.
Frente al río hay hostería para grupos numerosos. El Refugio los Naranjos, una casona colonial, tiene servicios aptos. Boulevard Zerboni e/ Alsina y Belgrano. Sino en cabaña “Los Malvones” en el centro.
El Parque Criollo esta listo para que disfrutes de como es el entrevero, la jura, el encierro y la suelta de tropillas entabladas, la jineteada y los payadores…
Todo está preparado para recibir al visitante: pintorescos alojamientos, esmerada gastronomía y una nutrida agenda de propuestas. La Tradición y lo criollo para sus habitantes es cotidiano, para nosotros es una vivencia única.
No te pierdas el pago del gaucho.
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Fotos: Ricardo Seronero/sentiargentina.com