Por Fabiana Chércoles desde Puerto Madryn.

Al programar el viaje la emoción comienza mirando los números. La población mundial de Ballena Franca Austral se estima alrededor de los 13000 ejemplares según datos que dieran del ICB (instituto de conservación de ballenas). A las costas de Península Valdés llegaron aproximadamente 2.500 ejemplares en el 2014. En su mayoría al Golfo Nuevo -próximas a la ciudad de Puerto Madryn- pero también en el Golfo San José.

A fines junio 2015 los estudios del CENTAP (Centro Nacional Patagónico que depende del CONICET) hizo un conteo aéreo de aproximadamente 150 con un par de crías.

Y vienen más, porque la temporada recién comienza. Si bien no hay números concretos a fines de julio, la población aumenta y muchas de ellas deciden seguir viniendo a estas costas. Está claro que no solo es un factor el que condiciona su llegada, sino muchos. Pero eso es para los científicos, a nosotros lo que nos importa a la hora de planificar este viaje, es que hay ballenas para ver, y que seguirán viniendo por el momento; pero por sobretodas las cosas es que es una experiencia imperdible y está aquí en nuestro país, no necesitas pasaporte para verlas.!!

Si tienes la oportunidad de llegar por la empresa Andes Líneas Aéreas, desde el aire se ve el Área Natural Protegida Península Valdés. Claramente se aprecia la conexión al continente por el istmo Carlos Ameghino que se interpone entre los Golfos Nuevo al sur y San José al norte; y al este nuestro rico Mar Argentino. Se anticipa a la jornada que vivirás para disfrutar de la fauna en toda la región.

Llegando a Puerto Madryn, la ciudad le debe su nombre a al capitán Sir Love Jones Perry, del Castillo de Madryn, sito en la localidad de Arfon, Gales. Personaje que integró la comisión organizadora de la recepción de los galeses. En el año 1865 llegaron a bordo del barco Mimosa y dejaron su huella cultural.

Localidad costera, se extiende a lo largo de 5 km. frente al mar. Posee puerto de aguas profundas con dos muelles. El más turístico, es el muelle Luis Piedrabuena, ya que anclan espléndidos cruceros, con cantidad de pasajeros para disfrutar de este lugar.

El importante movimiento comercial, se observa en toda la urbe. Cuenta con playas de arenas, con elegantes establecimientos gastronómicos en cada bajada a las playas. Su arteria costera es Av. Julio Argentino Roca, usada para el paseo dominguero de sus habitantes, al igual que el Bv. Almte Brown. Otra calle muy importante, perpendicular a Roca, es la “28 de Julio” nombre en homenaje a la fecha del desembarco galés. Caminando por ella, te conecta con la plaza principal: San Martín. Para comprar souvenirs cualquiera de estas dos arterias tienen mucho que ofrecer.

Sobre la escotadura de la costa y hacia el sur de esta localidad, se encuentra la zona más residencial. Punta Cuevas, llamada así por ser base del asentamiento galés, hoy es Sitio Histórico. Estas cuevas fueron socavadas por ellos para usarlas como viviendas. Muy cerca de allí se alza el monumento al Indio Aónik’enk en homenaje al pueblo originario Tehuelche. Aquí hay una gran vista panorámica del Golfo Nuevo. A 150 metros se encuentra el Ecocentro. Está dedicado a la interpretación de los ecosistemas marinos y al desarrollo de actividades educativas científicas y culturales.

La oficina de informes de Turismo, se encuentra exactamente en Av. Roca 223, y atienden desde las 7AM. en adelante con un horario extenso. Cerca de aquí, las que están para verlas todo el día, y la noche también -diría mi tía Ñata- son las ballenas.

Modalidad: Avistaje desde la ciudad.
Sobre el muelle Luis Piedrabuena es una de las opciones que te permite disfrutarlas. Son un visitante más, ellas se dejan ver por todos lados. Aconsejada por la guía que nos acompañó en todas las actividades, Marta Ficarra, no me perdí esta oportunidad de verlas…

Desde las avenidas principales, por toda la Costanera, o desde la misma puerta de tu hotel saltarán, mostraran su cola o simplemente nadaran con sus ballenatos, cerca de la costa. Es muy fácil acceder a bares y restaurantes para observarlas o incluso en el silencio de la noche escucharas su sonido característico. Te lo aseguro no lo podrás creer!

Para introducirte en el mundo marino, una opción es conocer el Museo Provincial del Hombre y el Mar, es un museo oceanográfico. En las calles Domecq García esquina José Menéndez se alza esta casona de los años 20’ aproximadamente, que fue cedida por los descendientes de su dueño Agustín Pujol a la provincia de Chubut; y esta, abrió sus puertas como sede del museo en 1972. La muestra actualmente en exhibición integra dos aspectos de Puerto Madryn: la flora y la fauna, y el pasado, dado por los restos paleontológicos encontrados en la región. Una de las piezas más impresionantes es un calamar gigante, además de ver otros ejemplares marinos.

Hacia el norte de Puerto Madryn, a solo 15 Km. en las costas del Golfo Nuevo, frente a la península de Valdés, se pueden ver ballenas también. Es lo que se le llama el “Avistaje Costero”, en el Doradillo. Comprende un área terrestre, con un frente de aproximadamente 25 Km de costa, desde Punta Arco hasta Cerro Prismático. Aquí la población de ballenas mayormente es ballenas preñadas y madres con sus crías. La particular conformación de las costas de este sector permite que al subir la marea las ballenas se muestren a escasos 8 metros de las playas de El Doradillo, que por cierto diferentes a las playas céntricas, están conformadas por cantos rodados. La proximidad de los Acantilados sirven como miradores naturales.

El Área Natural Protegida El Doradillo, está administrada por el Municipio de Puerto Madryn y su protección alcanza al ambiente marino y terrestre, siendo la superficie total de 7.500 ha. Es un espacio público y su ingreso es gratuito. Para que sea exitoso este Avistaje Costero te aconsejo consultar la tabla de mareas ya que las mareas altas (o pleamar) permiten un mayor acercamiento de las ballenas.
Además podrás disfrutar de la flora como jarillas y coirones y más de 150 especies de aves, además de otros mamíferos terrestres y marinos.

¿Que las ves cerca? ¡Seguro!!. Son amigueras.
Navegando en las aguas del Golfo Nuevo es el broche de oro de la Eubalaena australis o ballena franca austral donde se realiza la modalidad “Avistaje Embarcado”.

Partiendo de Puerto Madryn, por RP1 y luego por RP2, se llega al acceso de Península Valdés. El área natural protegida más importante por su concentración de fauna y extensión, y mundialmente reconocida por los avistajes.
En 1999 fue declarada Sitio del Patrimonio Natural de la Humanidad por la UNESCO, el máximo galardón que puede tener un sitio de estas características. Continuando el recorrido te topás con el puesto de control “El desempeño” donde se abona el ingreso al área protegida. Continuando, se accede a la localidad turística de Puerto Pirámides, único centro de servicios de Península Valdés. Aquí es el punto de partida de la experiencia más maravillosa con la fauna en nuestro país: las excursiones náuticas de avistaje de la Ballena Franca Austral.

En esta aventura, ella, se muestran en todo su esplendor, con las actividades que comúnmente vienen a realizar al Golfo, el ritual de la reproducción. Todo a escasos metros de tus ojos. En seguras y confiables embarcaciones, durante un paseo de 1 hora y media, las podrás ver jugueteando alrededor tuyo.

¿A cuantos metros?, no te puedo decir, depende de la suerte, pero que las ves cerca, ¡¡seguro!! Yo tuve la posibilidad de ver a una ballena juvenil, que hizo todo para ser fotografiada y filmada: pasó por debajo de nosotros infinidad de veces, se acercó, se puso de costado y nos enseñó sus enormes ojos, dio brincos, mostró su chorro en V, flameó su cola. Como si esto fuera poco, además se hizo amiga, porque nos alejamos y nos seguía, ¡¿qué más puedo pedir?!

Los capitanes son entrenados y calificados, para lograr acercamientos de calidad para la observación, evitando perturbar o dañar a los animales. Parte de la tripulación también, es un guía que explica y aconseja, para que todos puedan vivir, esta gran aventura sin igual.  El capitán salió en búsqueda de otras, y lo logró, pero ninguna como ese juvenil…

Otro sitio a visitar embarcado es la lobería de Punta Pirámides, que depende de la época del año también están en reproducción.

Dentro de Península Valdés podes visitar el Centro de Interpretación; la Isla de los Pájaros, un sitio de reproducción de aves; la réplica de la capilla del fuerte San José, un asentamiento español, etc. En la entrada te recomiendan de acuerdo a tu tiempo.

En el camino desde Puerto Pirámides a Punta Delgada se observan las Salinas Grandes y Chicas extensas depresiones que superan los 42 mts. bajo el nivel del mar.

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Fotos: Fabiana Chércoles y Ricardo Seronero/sentiargentina.com